El día 25 de octubre, durante la peregrinación de Sebúlcor a San Frutos, Alberto localizó y sacó varias fotografías a esta bonita planta. Al día siguiente me pasó las fotos y me dijo qué no sabía como se llamaba y qué nunca la había visto en la zona, qué a ver si podía averiguar algo. Gracias a varios expertos de Biodiversidad Virtual que han podido identificarla, sabemos que se trata de una Inula langeana G.Beck y qué no es una planta muy común (aunque no es extremadamente rara). También nos comentan qué este ejemplar tiene una forma anómala de crecimiento, ya que suele ser una planta bien ramificada de al menos 50 cm de altura. Es una planta Hemicriptófita, esto quiere decir qué muere anualmente la parte aérea y sus yemas invernantes (de estación seca o desfavorable), se quedan más o menos al ras del nivel de la tierra del suelo, donde a menudo están abrigadas por hojas protectoras o son parcialmente cubiertas por la hojarasca o el humus de la superficie.
Se encuentra dentro del Catálogo de Flora Protegida de Castilla y León bajo la figura de “Atención Preferente”.
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